Además de las disfunciones sexuales, hay otro tipo de problemas que afectan a la salud sexual masculina y que preocupa de forma especial a los hombres. Los problemas de fertilidad afectan a uno de cada tres hombres en edad fértil, al menos de forma puntual alguna vez en su vida. Mucho tienen problemas permanentes de infertilidad, pero el problema de la mayoría es que ven su capacidad reproductiva mermada de forma temporal, tras padecer algún tipo de trastorno que provoca una bajada en el recuento de espermatozoides.

Por suerte, en los casos que no son definitivos, la fertilidad masculina puede potenciarse de forma natural.

Una de las claves para mantener el recuento de espermatozoides en un nivel aceptable es llevar una vida saludable, es decir, llevar una vida llena de hábitos que contribuyan a mejorar un estado de salud general, y desterrar todos aquellos vicios y malas costumbres que puedan hacer que el estado físico se resienta.

Es muy importante dejara de fumar y dejar de beber, o al menos hacerlo con moderación. Hacer ejercicio de forma moderada y regular también ayuda a estar en forma para ser papá.

Un alto aporte de este tipo de elementos grasos ayuda a frenar el impacto de la contaminación ambiental sobre la calidad del semen. Recientes estudios realizados al respecto, afirman que alcanzando la cantidad diaria recomendada de este tipo de oligoelemento, se puede mejorar de forma notable la fertilidad masculina.

Un alto aporte de este tipo de elementos grasos ayuda a frenar el impacto de la contaminación ambiental sobre la calidad del semen. Recientes estudios realizados al respecto, afirman que alcanzando la cantidad diaria recomendada de este tipo de oligoelemento, se puede mejorar de forma notable la fertilidad masculina.

Para cumplir con esta premisa, se deberían consumir, pro ejemplo, al menos unas quince nueces al día, o un bol de copos de avena en el desayuno. Las semillas de lino también contienen gran cantidad de Omega • Tanto la avena como el lino se encuentran en los compuestos de productos integrales como el pan o los cereales.

Esta vitamina interviene en la producción hormonal que interviene en los procesos de reproducción, tanto masculina como femenina. Ayuda a aumentar la movilidad de los espermatozoides, y además favorece la fecundación del óvulo.

El aceite de oliva y el de girasol, tan presentes en nuestra gastronomía, son dos de las principales fuentes de vitamina E. También podrás encontrarla en frutos secos como las pipas, las avellanas, los piñones o los pistachos.

En cuanto a las verduras, es importante que no falten en la dieta de la pareja que busca tener un bebé. Los boniatos, los aguacates y algunas frutas como los mangos o los caquis, también destacan por su alto aporte en vitamina E.

También en los productos integrales la vitamina E se encuentra en altas cantidades, y acompañada de minerales que también ayudan en el empeño por lograr el embarazo.

Fumar es un mal hábito que afecta de forma importante a la calidad del esperma. Por eso es importante que refuerces el consumo de alimentos ricos en otro tipo de vitaminas y minerales. Por ejemplo, es importante tomar vitamina A, ya que el tabaco la destruye, y es una vitamina muy importante para la producción de esperma. La encontrarás en las zanahorias, calabazas, caquis, etc. La vitamina C también es una de las más importantes para el proceso de producción de esperma, y sin embargo el tabaco afecta mucho a su metabolismo. Por eso, es necesario tomar más cantidad de la recomendada. Los cítricos son una gran fuente de vitamina C. También el ácido fólico es muy importante en la producción de gametos masculinos. Se encuentra sobre todo en las verduras y los frutos secos.

Si quieres ser papá es importante que te cuides. No solo la madre es la responsable de la fertilidad de la pareja y del buen estado del bebé.