miércoles, 4 de julio de 2012
Intersexualidad: dos sexos, una persona
El hermafroditismo es una condición biológica de algunos animales, que reúnen en un mismo cuerpo características de los dos sexos, el masculino y el femenino. Es decir, el mismo ser es capaz de reproducir células sexuales (óvulos y espermatozoides), y fecundarse a sí mismo.
En los seres humanos ocurre algo parecido, aunque no exactamente igual. Las personas pueden tener órganos sexuales femeninos y masculinos, pero no se conocen casos en los que se autofecunden. Hasta ahora también se les llamaba hermafroditas, sin embargo, al no contar estas personas con la capacidad reproductiva que tienen los animales denominados como tal, actualmente se les llama “intersexuales”.
¿En qué consiste la intersexualidad?
La intersexualidad es una condición genética de las personas, que se da de forma muy poco común. Estas personas tiene unas características cromosómicas que discrepan con los órganos sexuales y o con la forma de los genitales. Por ejemplo, una chica con cromosomas XX (femeninos), que tiene testículos, y un micropene. O un chico, con cromosomas XY (masculinos), y una abertura vaginal, o un pene y ovarios… La intersexualidad puede presentarse de múltiples maneras, no tiene una forma estándar para aparecer.
¿Cómo puede detectarse la Intersexualidad?
Algunos casos son evidentes o de fácil sospecha, sin embargo otros están bastante más ocultos y no se llegan a descubrir por completo hasta que no se desarrolla la función sexual. Algunos de los síntomas más frecuentes son:
- Genitales ambiguos en el momento del nacimiento.
- Micropene o clitoromeglaia: Miembros híper o hipo desarrollados pueden ser una señal.
- Fusión parcial de los labios mayores o menores.
- Testículos que parecen no descender. Puede ser síntoma de que en vez de testículos, haya ovarios. (En niños).
- Protuberancias en los labios genitales, o en las ingles de las niñas. Pueden resultar ser testículos hipodesarrollados.
- Hipospadias: la abertura del pene está en un lugar diferente a la punta; en las niñas, la uretra (canal urinario) se abre en la vagina.
- Genitales extraños, con apariencia diferente a lo normal.
- La pubertad llega tarde o pasa inadvertida.
- Cambios extraños e inesperados en la pubertad.
Si observan un desarrollo sexual anómalo en un niño, es importante que consulten con un especialista cuanto antes.
¿Qué tipo de pruebas médicas determinan la intersexualidad?
A veces, sobre todo en los casos menos evidentes, es necesario realizar una serie de pruebas médicas para confirmar alteraciones cromosómicas u hormonales que confirmen la intersexualidad. Las analíticas genéticas y hormonales son un primer paso para el diagnóstico. Ecografías y exámenes endoscópicos también son interesantes para examinar los órganos internos de los pacientes. Para profundizar en el examen también se suelen efectuar pruebas de electrolitos, estimulación hormonal o pruebas moleculares.
Pronóstico y Tratamiento
Es necesario llevar a cabo un tratamiento médico, pero también psicológico, tanto para los niños como para los padres, ya que la intersexualidad es un tema delicado al que es difícil enfrentarse con acierto.
Antiguamente se pensaba que la opción más acertada era asignar un sexo, el que prevalecía en el niño, lo antes posible. A partir de ahí se reconstruían los genitales y se llevaba a cabo el tratamiento hormonal, de manera que el niño se desarrollaba conforme al sexo elegido. A veces cuando no estaba muy clara la condición que prevalecía, se le asignaba el sexo femenino, porque los genitales femeninos eran más fáciles de reconstruir.
Sin embargo, el aspecto de los genitales no es el que hace que un sexo prevalezca o no sobre otro en una persona intersexual. La producción hormonal también es decisiva, y ésta puede cambiar a lo largo del desarrollo del niño.
Por eso, hoy en día, los expertos aconsejan esperar el mayor tiempo posible, dentro de unos parámetros de seguridad médica, para involucrar al niño o la niña en la decisión sobre el sexo que se le va a asignar.
Intersexualidad y Sociedad
Un binomio complejo y complicado, puesto que el mundo se divide generalmente en masculino y femenino. Se van aceptando condiciones sexuales, como la homosexualidad y la transexualidad. Sin embargo, este problema no es de orientación sexual, sino de identidad sexual. Y la identidad sexual es una de las principales partes de la identidad de la persona. La sociedad no trata igual a un niño que a una niña. Ni siquiera los propios padres lo hacen.
El problema social es la incomprensión. La sociedad no ve normales a individuos que no son hombres ni mujeres, y a menudo, las características físicas o personales del intersexual son rechazadas por su entorno.
Además el niño o la niña suele ser tratado desde pequeño con el sexo que los médicos o sus padres le han asignado. Y puede que acierten, pero en otros muchos casos, la elección no es la correcta, y de mayores se sienten encerrados dentro del sexo que no les corresponde.
La ayuda psicológica y la terapia de grupo con otros afectados y familiares de afectados por esta extraña condición, son esenciales y de gran ayuda.
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