miércoles, 19 de marzo de 2014
Medicamentos en el embarazo
Cuando se está embarazada sabes
que, coger algún tipo de enfermedad, puede ser bastante complicado, no porque
te pongas en riesgo con tu bebé sino porque en realidad no puedes tomar
medicamentos que, de otro modo, te ayudarían a combatir esa enfermedad o
problema que te causa malestar y, si normalmente se te va en una semana, a
veces puede tardar más tiempo en irse en el caso de estar embarazada.
Si a eso le sumamos el hecho de
que algunos medicamentos pueden ser dañinos para el feto, la mayoría de ellos,
debido a que son capaces de atravesar la placenta y exponer al pequeño a
sustancias perjudiciales para su débil sistema inmunológico, hace que te
plantees dos veces tomar cualquier tipo de medicamento aunque has de saber que
hay algunos medicamentos que son seguros y que, si los médicos te los recetan
en esos momentos, es porque de verdad no pasa nada con ellos.
Tomar medicamentos durante el embarazo
La norma es que, durante el
embarazo, se evite tomar cualquier tipo de medicamento, no solo los
farmacológicos, sino también los naturales, salvo que tu médico te haya dado
permiso para ellos. Y el motivo no es otro que el hecho de que la mayoría de
los medicamentos les van a afectar al bebé o bebés que lleves dentro tuyo, el
llamado teratógeno, capaces de hacer que el pequeño sufra algún mal que podría
haberse evitado de no tomarlos.
Sin embargo, hay ocasiones en que
esos medicamentos se necesitan y es necesario. En esos casos, y solo aquellos
medicamentos prescritos por un médico, son los que deberías tomarlos, aunque te
de miedo hacerlo, porque esas pastillas son seguras para la salud de tu bebé.
La etapa más sensible para un feto
en cuanto a los medicamentos es el primer trimestre porque es cuando los
órganos se están formando y cuando, una pastilla de nada, puede desencadenar un
caos en el pequeño. Durante el siguiente trimestre, aunque hay riesgo, éste
suele bajar mucho, y en el tercer trimestre de nuevo baja bastante.
Medicamentos seguros en el embarazo
Si quieres o necesitas tomar algún
medicamento existe una clasificación en base a la cual puedes saber si los
medicamentos son seguros o no. En base a esto tendrías tres grupos importantes:
- Fármacos precisos, son aquellos imprescindibles que no se pueden dejar en el embarazo. Por ejemplo, la insulina en los diabéticos, que no pueden pasar un día sin ella porque ponen en riesgo su salud.
- Fármacos que previenen riesgos. Son medicamentos que pueden prevenir problemas en el feto o en la propia madre. El ejemplo más importante sería el ácido fólico que previene malformaciones en los bebés y que, últimamente, se lo mandan a todas las mamás los primeros meses junto con varias vitaminas para potenciarlas.
- Fármacos que disminuyen riesgos. Son medicamentos que pueden evitar riesgos graves en el feto o en la madre. Un ejemplo sería el paracetamol que es lo que recetan cuando una persona embarazada está resfriada y hay fiebre de por medio.
Otra clasificación que se suele
seguir es la de la Administración de Alimentos y Drogas (FDA) que clasifica los
medicamentos en relación a lo seguros que son en el embarazo. Así, tendrías los
siguientes:
- Categoría A – Son medicamentos muy seguros durante el embarazo. Algunos son: el ácido fólico, la vitamina B6, y los medicamentos para la tiroides.
- Categoría B – Son medicamentos que no parecen causar problemas congénitas graves en el feto. Son: algunos antibióticos, acetaminofenol (Tylenol), aspartame (edulcorante artificial), famotidina (Pepcid), prednisona (cortisona), insulina (para la diabetes), y el ibuprofeno (Advil, Motrin).
- Categoría C – Medicamentos que pueden causar algunos problemas, bien a la madre o al feto. Entre estos medicamentos se encuentran la proclorperazina (Compazine), el Sudafed, el fluconazol (Diflucan) y la ciproflozacina (Cipro).
- Categoría D – Se trata de medicamentos con riesgos evidentes de problemas para el feto. Un ejemplo lo tendrías en el alcohol, el litio (para la depreisión maníaca), o la fenitoína (Dilantin).
- Categoría X – Son aquellos que no deben ser tomados durante el embarazo. Por ponerte un ejemplo, estarían los medicamentos de acné, soriasis, sedantes, etc.
Siempre que tengas alguna duda sobre si tomarte un
medicamento o no lo mejor que puedes hacer es consultar a tu médico ya que él o
ella estará más habituado a saber cuáles son los medicamentos que una mujer
embarazada puede tomar y así no poner en riesgo la salud o la vida del bebé, ni
la tuya propia.
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